martes, 17 de noviembre de 2015

También yo quiero recordarme

Me cubre un desasosiego con su  manto de plata
de plata es el rojizo cielo, cielo
podrido por dentro.
Tal vez es que recuerdo otras mañanas
llenas de dolor y pausas
colores azules y grises enredados
púrpura en mis entrañas.
¿Qué pasa?
También yo quiero recordarme,
como los pájaros huyen del norte
a la raíz de los dientes de antes.
Colores extraños que me roéis las entrañas
forma avellana y manos de amante
menta gritos y dentro
púrpura en el cuerpo.
Pero debo andar despacio.
Soy claraboya de espacios rendidos,
manos de amante y colores extraños
vacíos.

domingo, 15 de noviembre de 2015

He cruzado.
Deliré de fiebre
me corté las manos
quise romper cuellos
desatar el árbol
desatar las manos,
pero he cruzado.
Desde las negras aguas verdes
nunca más madera
trastabillando
bajo las negras aguas rojas
he cruzado.
Una sombra que se niega al negro,
unos rojos, verdes labios,
un todo azul, violeta y vivo,
enredándose en el trigo
de mayo.
El trigo que te cae por las mejillas,
el trigo que se enlaza, desatado,
el trigo entre tus brazos, vaina, brazos
y en el tálamo.
Yo, que he temido nombres, meses, sombras
invisibles y amantes extraños
soy un único haz de un único trigo
(y una única boca y único álamo,
único pálpito único clamor)
de amor maduro que gotea cálido.